Gafas Oakley Radar Lock XL

La firma norteamericana Oakley lleva desde los noventa marcando la pauta en cuanto a calidad de gafas y diseño. Su modelo más exitoso posiblemente sea el M-Frame, antiguamente llamado Mumbo, y las Radar fueron las llamadas a sustituirlas; sin embargo, las 'M' siguen en catálogo dado que siguen teniendo legiones de seguidores.

La dura misión de sustituir a un icono se le encomendó a una gafa que, de nuevo, transgredía los cánones de diseño de la época y la versión renovada de estas, la RadarLock, es la que te traemos a estas páginas. La principal diferencia con las Radar es el sistema de sustitución de lentes, denominado Switchlock, mucho más sencillo, sin producir tensiones a los plásticos y que no requiere ni fuerza ni una especial habilidad. Sencillo, efectivo y sólido. Sin duda una interesante mejora para un producto ya de por sí excelente dado que lo conocíamos en su primera versión.

Trataremos de ser breves en el tema de las opciones disponibles, una de las características de las Oakley deportivas, dado que es mareante: diversos colores, incluso personalizadas como tú quieras; tres tamaños de lente y forma ligeramente distintas (la Pitch algo más grande que la Patch y la XL); lentes ventiladas o no; diversas coloraciones de lente, desde la transparente a la más oscura (Black Iridium); polarizadas o no (menores reflejos); e incluso, como curiosidad, hay una gama entera (RadarLock incluida) para caras asiáticas, más pequeñas y con distinta geometría.

Resistencia sobresaliente

La tecnología que tienen estas gafas supera a lo que hay en cualquier otra en el mercado, pero en vez de citarlas tal cual lo combinaremos con las sensaciones que nos aportan. El material en contacto con la piel es una goma de excelente tacto y agarre (Unobtainium), incluso en condiciones de humedad, por mucho que muevas, incluso con fuerza, la cabeza, no se desplazarán ni un milímetro. Alucinante. La claridad de visión es apabullante, cierto que la lente nueva la disfrutaremos solo el primer día, pero con algunos cuidados que le dispensemos (siempre en funda cuando no la usemos, por ejemplo), se mantiene durante años; se denomina High Definition Optics y conjuga una geometría bien estudiada, asimilada a un elipsoide donde nuestros ojos son los focos de dicha forma tridimensional, y un excelente plástico que nos ofrece una excelente nitidez.

La resistencia de la montura y la solidez de la construcción son soberbias, si la pisamos o nos sentamos posiblemente la rompamos, pero dado que hemos usado Oakley durante años sabemos de su contrastada fiabilidad: hace tiempo, y como demostración, una de las pruebas internas era disparar a la lente y montura con una escopeta de perdigones, los cuales no penetraban. Y si esto no es suficiente argumento, pasa las pruebas más duras del ejército americano, normas más estrictas que las civiles en cuanto a resistencia y calidad de visión. Finalmente, y sin ánimo de ser exhaustivo, sorprende la capacidad hidrofóbica de la lente, repele el agua y hace que no se acumulen apenas gotas.

Las sensaciones han sido en todo momento excelentes, por claridad de visión y ajuste, un paso por delante de lo que demanda el mercado. Soberbias para correr, en asfalto, en montaña, bajando, subiendo, jamás empañadas; también las hemos probado en bici de carretera y montaña con resultados igual de buenos. Sin duda, producto recomendable y una inversión para varios años.