Nike Lunarglide +4

Nike sigue con su política de democratizar las zapatillas de running, lanzando modelos dirigidos al mayor número posible de corredores. Una vez más lo consigue con las Lunarglide+4, la última versión del modelo más exitoso y vendido de su gama Lunar. Si las versiones pasadas proporcionaban al corredor estabilidad y una amortiguación suave y reactiva, esta que hemos tenido la oportunidad de probar ofrece el mismo estilo de carrera cómodo y amortiguado, pero lo complementa con lo que es su principal novedad, que rápidamente salta a la vista: el dinámico Flywire (hilos extremadamente ligeros y resistentes) uniendo los ojales a los cordones para lograr un ajuste perfecto, adaptable y más ligero que su predecesor. Además, la malla también se ha modificado y ahora es más ligera y transpirable, con aberturas en forma de rombos para adaptarse mejor a la flexión natural del pie.

Gracias a estos materiales más ligeros en el upper y a un uso algo menor de goma en la suela, pesa casi 40 gramos menos que la Lunarglide+3 (283 gramos para la talla estándar), lo que se nota y agradece, más teniendo en cuenta que no ha perdido ninguna de sus cualidades, especialmente esa cómoda amortiguación que tanto éxito le ha dado. Además, estos finos hilos le confieren un look más moderno.

La Lunarglide+4 sigue contando con dos de las principales señas de identidad de este modelo: la ligera espuma Lunarlon en la mediasuela -que ofrece una amortiguación suave y reactiva-, y la plataforma Dynamic Support, pieza en forma de cuña en la mediasuela que estabiliza la pisada y que la convierte en una zapatilla indicada para un amplio espectro de corredores, desde neutros a pronadores, siempre que la pronación no sea muy severa.

Más ligera y rápida

El Lunarlon está construido en dos densidades: la parte exterior es más dura y proporciona firmeza en la pisada, mientras que en la interior el material es más blando para recoger mejor el pie. Además, para una mayor estabilidad incluye un clip de sujeción en el talón que se mueve junto a la pisada del runner, impidiendo que la parte trasera del pie se desplace, controlando así la pronación en la pisada.

La amortiguación sigue siendo una de sus puntos fuertes, pese a ser una zapatilla más liviana. Por eso, la Lunarglide+4 resulta ideal para corredores ligeros de nivel medio que buscan un modelo rápido de entrenamiento, ya que nos permite ir cerca del suelo con una buena respuesta y sensación de terreno, o para corredores de peso medio o medio-alto que no quieren calzar zapatillas pesadas.

Pero este modelo ofrece muchos más detalles técnicos: diversos detalles reflectantes para mejorar la visibilidad en condiciones de poca luz, plantilla FitSole con leve resistencia en su cara interna para corregir la ligera pronación; suela de caucho BRS 1000 en las zonas de más desgaste para una mayor durabilidad; estrías de flexión en la suela para una mejor flexibilidad, etcétera. Y como en todos los modelos que ahora lanza esta marca, es compatible con Nike+.

En definitiva, estamos ante un modelo para entrenar largo y tendido este otoño y apto para casi todos los públicos. Más ligera y rápida que su predecesora, más cómoda de calzar gracias al Flywire de su corte, tan estable como siempre y con la misma corrección de pisada, transición confortable y buena amortiguación que la han convertido en un modelo versátil. Con la misma esencia, pero más moderna y más LunarGlide.

Peso: 283 gramos.

PVP recomendado: 110 euros.