Aprende a correr con poco tiempo (II)

26. Correr es una actividad que puedes practicar en cualquier lugar en el que te encuentres. Lleva siempre contigo tus zapatillas de running. cuando tengas que desplazarte con motivo de algún viaje.

27. Si hace mal tiempo y estás en un lugar que dispone de una cinta de carreras (es muy frecuente que muchos hoteles la tengan en su gimnasio) aprovéchala.

28. Si pasas mucho tiempo en la oficina (y eres jefe) instala una cinta de carreras en algún lugar de la misma.

29. Si corres en un lugar que desconoces busca referencias y vuelve sobre tus propios pasos cuando hayas corrido la mitad de tiempo que ese día determina tu tabla de entrenamiento.

30. Si no tienes mucho tiempo, y siempre que te sea posible, ve corriendo al trabajo o vuelve de él a la carrera.

31. Si trabajas en horario partido y quieres aprovechar el mediodía para entrenar, localiza una ducha que puedas utilizar en el trabajo o en algún polideportivo o gimnasio próximo.

32. Si el no tener ducha es excusa para no correr quizá te valga saber que muchos corredores populares de los ochenta usaban una toalla humedecida con agua y gel. Luego se aclaraban con maña con el agua del lavabo. El desodorante y la colonia hacían el resto.

33. Consigue una bolsa de aseo que puedas dejar en un cajón, en la mesa de tu despacho, en una taquilla o en una mochila o bolsa que portes contigo a diario.

34. Para una limpieza personal (casi en seco) utiliza una esponja. Se trata de un gran invento.

35. Procúrate un lugar permanente en el trabajo para tus zapatillas. Las zapatillas son el principal bulto que debes acarrear diariamente. Intenta tener dos pares.

36. Hazte con una buena bolsa para guardar bien tu ropa de running una vez hayas terminado de correr.

37. Si vas al trabajo corriendo o vuelves a casa de él una mochila especial con tiras ajustables te permitirá transportar cuando corres tu ropa y enseres de trabajo con comodidad y sin los molestos rebotes que ocasiona a tu espalda una mochila convencional.

38. Hidrátate bien y come sano. No hay ninguna excusa para no llevar una alimentación buena estando todo el día fuera de casa.

39. Ten preparadas tus comidas con antelación si eres de los que te llevas la comida al trabajo.

40. No hagas caso a comentarios o a miradas extrañas de tus vecinos cuando te vean a horas intempestivas yendo a entrenar.

41. Hazte visible ante los automóviles si te ves obligado a entrenar muy temprano o a última hora del día. No olvides llevar contigo algún reflectante, o vestir prendas luminosas.

42. Si tus horas de entrenamiento coinciden con momentos de escasa luz evita lugares solitarios.

43. Avisa y haz saber a tus familiares o a tu pareja cuál es tu circuito habitual de entrenamiento. No tiene porqué sucederte nada, pero para ellos (y para ti) será más seguro saber dónde poder encontrarte.

44. Lleva contigo el móvil si corres a horas intempestivas o si se vas a realizar una carrera muy larga.

45. Si has decidido correr con el móvil, se tú quien realice la llamada. Hazlo sólo cuando sea imprescindible. Correr debe ser tu momento de desconexión y no el de estar atendiendo al teléfono a un cliente, a un socio o a un amigo.

46. Evita entrenar con música en lugares oscuros o solitarios en los que tu oído pueda ser necesario para advertirte de algún peligro.

47. Ante un peligro o amenaza aprovecha tu buena forma física y corre. Ya habrá tiempo para discutir con algún valiente el viejo dicho correr es de cobardes.

48. En verano el horario de sobremesa no es el mejor para entrenar pero si no te queda otra opción sal a correr antes de comer.

49. Cuando practiques running a la hora de más sol, consigue una buena crema protectora, una gorra y unas gafas de sol. Prueba además a cubrir tu nunca con un buff o un pañuelo ligero.

50. Equípate correctamente para correr. Las mañanas y las noches de invierno y las bajas temperaturas no deben impedir que te quedes sin correr. Los fabricantes tienen muchos y muy buenos productos para el frío.